Bien de interés cultural, el Centro Histórico fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad en 1987.
El Popocatépetl, el Iztaccíhuatl y la Malinche defienden Puebla, la capital del estado, situada a unos 100 kilómetros al este de Ciudad de México.
Cuando se creó en 1531, la ciudad estaba destinada a ser un asentamiento exclusivamente español en la ruta de Veracruz a México.
Puebla se distingue por su grandiosa arquitectura colonial, tanto civil como religiosa, que ha sido exquisitamente conservada y se suma a la experiencia única de explorar las calles de su centro histórico. No dude en comprar sus boletos de autobús con destino a Puebla para observar las numerosas fachadas que mezclan con gusto ladrillos, azulejos y relieves de argamasa blanca, los cuales representan el estilo barroco de la ciudad. De hecho, se ha ganado el sobrenombre de "Relicario de América" gracias a sus templos profusamente embellecidos.
Puebla se enorgullece de poseer una de las cocinas conventuales más exquisitas del país, reconocida por ser la cuna del mole poblano, plato insignia del país, y de los chiles en nogada, plato barroco por excelencia. Puebla también posee una arquitectura colonial distintiva, cerámica de Talavera y coloridas tradiciones.
Cada año, del 30 de abril al 31 de mayo, la ciudad se engalana para conmemorar la Feria Nacional de Puebla.
Con una temperatura media de 16.7°C, el clima predominante es templado subhúmedo con lluvias estivales.